00:01 h. lunes, 29 de abril de 2024

ENTREVISTA A BEGOÑA SERRANO ORTEGA, DIRECTORA DE LA AGENCIA ASTURIANA DE EMIGRACIÓN

Los emigrantes saben discernir cuándo se busca el voto y cuándo se hace política desde el convencimiento

Cronicas  |  13 de mayo de 2010 (19:27 h.)
Con el inicio del año, Begoña Serrano Ortega asumió la Dirección de la Agencia Asturiana de Emigración y, desde entonces, se ha dado muy pocos días de respiro. La colectividad en el exterior la conocía bien desde que, en 2004, pasó a formar parte del Gabinete de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad del Principado, adscrita al Consejo de Comunidades Asturianas.

Con el inicio del año, Begoña Serrano Ortega asumió la Dirección de la Agencia Asturiana de Emigración y, desde entonces, se ha dado muy pocos días de respiro. Licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de Oviedo, con fama de mujer afable y de trabajadora incansable, inició su trayectoria profesional en la Cátedra Jovellanos de Extensión Universitaria de la institución académica asturiana y en 1990 asumió la responsabilidad del archivo de la Fundación ‘José Barreiro’. Llegó con el año, pero no era nueva. La colectividad en el exterior la conocía bien desde que, en 2004, pasó a fo\"\"rmar parte del Gabinete de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad del Principado, adscrita al Consejo de Comunidades Asturianas. 

Pregunta. ¿Cómo han sido estos primeros meses al frente de la Agencia?, ¿en qué se ha centrado su trabajo?

Respuesta. Han sido meses de intenso trabajo de todo el equipo. Hemos preparado las convocatorias que dependen de la Agencia Asturiana de Emigración: ayudas individuales, Centros Asturianos y retornados. En este momento están publicadas las tres convocatorias, las trabajadoras sociales se encuentran en América para cubrir la atención a nuestros emigrantes no sólo en Cuba, Venezuela y Argentina –donde, por cierto, esta atención ya no sólo se realiza en Buenos Aires, sino que se ha extendido a otras provincias–, también a Brasil y Uruguay. Además estamos evaluando el Plan de Emigración, seguimos adelante con los convenios sociosanitarios… En fin, están siendo meses muy intensos, pero disponemos de un buen equipo y con la experiencia acumulada de todas las cosas positivas que se han ido poniendo en marcha durante los últimos diez años.

P. Usted es una gran conocedora de la emigración asturiana, ¿cuáles son sus prioridades?

R. Mis prioridades son los y las emigrantes de Asturias que están en situación de precariedad, la atención a los asturianos que retornan y, desde luego, la colaboración con las colectividades asturianas, que hacen un trabajo de mantenimiento de los lazos con Asturias y de difusión de la cultura asturiana impagable. He trabajado cinco años en el Consejo de Comunidades Asturianas y esa experiencia me dio la oportunidad de tener una relación muy directa con las personas que pertenecen a las colectividades asturianas, directivos, socios y, especialmente, con los jóvenes, debido a los programas de formación como la Escuela de Asturianía, que implicaba ese contacto directo. Es verdad que eso está siendo una gran ayuda en mi responsabilidad actual.

P. Son muchas las demandas de los Centros Asturianos, ¿hay algún país que le ocupe o preocupe especialmente?

R. Los Centros Asturianos y los asturianos y asturianas que están en el exterior demandan su derecho a ser partícipes de la vida social, cultural y política de su comunidad de origen que es Asturias. En cuanto a esta pregunta, nos preocupan especialmente los asturianos que están en países cuya cobertura social y sanitaria es deficitaria. Desde aquí tratamos de mitigar las consecuencias de esa peculiar realidad que les afecta. Además, en este momento nos está preocupando especialmente Chile, por la situación en la que han quedado algunos asturianos a raíz del terremoto. Es un asunto en el que también estamos trabajando.

P. Un gran trabajo el de los Centros Asturianos en ese país.

R. Sin duda. Me gustaría resaltar que lo sucedido en Chile ha puesto de nuevo de manifiesto la labor de solidaridad de los Centros Asturianos. Las tres colectividades asturianas de Chile –la de Santiago, la de Valparaíso y la de San Fernando– se movilizaron inmediatamente para trasmitir noticias, organizar la ayuda y colaborar con nosotros para realizar un diagnóstico de la situación y de las necesidades. Eso viene a demostrar que el espíritu del origen de muchos Centros Asturianos, que nacieron como sociedades cuyo objetivo era la ayuda mutua entre asturianos, sigue vivo.

P. ¿Hay que reorientar la política de emigración más hacia los descendientes de asturianos que hacia los oriundos del Principado?

R. Pienso que no hay que hacer en ese sentido grandes cambios. La política de emigración desde el año 1999 ha estado orientada a los asturianos y asturianas de origen y también a sus descendientes, que se sienten y son asturianos. En la medida en que el fenómeno migratorio cambió, los reajustes se han ido haciendo necesarios y los propios planes han ido asumiendo las nuevas realidades.

P. ¿Para qué servirá el próximo Plan de Emigración?

R. El actual Plan de Emigración tiene una vigencia de cuatro años, 2008-2011, y estamos en este momento en la mitad de su ejecución. La puesta en marcha de los Planes de Emigración en las tres últimas legislaturas, que implican a la mayoría de las Consejerías del Principado, han supuesto un gran esfuerzo año a año y han marcado una clara voluntad política de apoyo a este colectivo. Si por algo se han caracterizado desde el año 1999 los distintos ejecutivos asturianos, ha sido por consolidar y potenciar fórmulas que han permitido dar continuidad y mejorar las políticas de emigración. Los Planes son prueba de ello y sirven para eso: para que los asturianos que viven fuera de Asturias sean ciudadanos asturianos con los todos los derechos.

P. ¿Las ayudas a los asturianos del exterior son las más vulnerables ante los efectos de la crisis?

R. De ninguna manera. Condicionado por el actual contexto de crisis global, el crecimiento del Presupuesto del Gobierno del Principado de Asturias para 2010 ha sido moderado y eso ha afectado, en mayor o menor medida, al conjunto de las Consejerías, pero estos ajustes no han afectado especialmente a nuestra población emigrante. En el caso del presupuesto de la Agencia Asturiana de Emigración, la reducción presupuestaria recae sobre partidas de gasto corriente y programas que, por una u otra razón, había que replantearse, intentando que eso tenga la menor repercusión sobre los emigrantes.

P. La recesión económica, ¿se está cebando en la colonia asturiana en el exterior?

R. No, especialmente. La actual recesión económica, como ocurre siempre, nos afecta a todos, pero sobre todo a aquella parte de la población mundial cuya situación económica es más precaria. Dentro de la colectividad asturiana tenemos que estar especialmente atentos a aquellas personas que, a causa de ella, pasan a estar en una situación que precise apoyo para salir adelante, y en esa tarea estamos.

P. ¿Qué opina de la polémica suscitada a propósito de los viajes institucionales del Principado?

R. Por un lado, que es una crítica muy fácil hablar del coste de estos viajes sin analizar a su vez la repercusión positiva que tienen por las relaciones comerciales que suscitan y la riqueza que eso significa para Asturias. En realidad, todos los gobiernos intervienen en este sentido para ayudar a abrir nuevos mercados y buscar nuevas inversiones, especialmente en épocas de recesión económica. Ese objetivo de los viajes institucionales ha sido expresado ya públicamente por los empresarios. En cuanto a las visitas a las comunidades asturianas del exterior, la pregunta me trae a la memoria escritos de colectividades asturianas recibidos por la Consejería y otros leídos en la prensa cuando se desencadenó esta polémica. En ellos expresaban lo importante que es para ellos contar con presencia institucional en aquellos actos en que consideran necesaria esta presencia para dignificar, valorar y realzar su imagen y la del Principado ante las instituciones y la sociedad donde están ubicados, y lo importante que es para ellos tener contacto directo con los miembros del Gobierno para que conozcan su realidad. En ellos nos recuerdan a todos que esa presencia es su derecho a la representatividad que se merecen.

P. Ese tipo de polémicas, ¿guardan entonces relación con el peso del voto exterior?

R. Los motivos creo que habría preguntárselos entre quienes las suscita. Personalmente, pienso que los asturianos y las asturianas del exterior tienen el derecho, y el Gobierno tiene la obligación, de seguir manteniendo en lo posible la relación directa que nos demandan, y que los asturianos y asturianas del exterior conocen el trabajo hecho desde 1999 hasta ahora por el Gobierno y que son capaces de evaluarlo y discernir cuando se busca sólo la inmediatez del voto o se hace política desde el convencimiento.

Noticias de hoy
Hemeroteca